08 CONVIENE DISTINGUIR
¿Por qué comparas tu mandamiento interior con un sueño? ¿Te parece absurdo, incoherente, inevitable, irrepetible, origen de alegrías o terrores infundados, incomunicable en su totalidad, pero ansioso de ser comunicado, como son precisamente los sueños?
Franz Kafka, "Cuarto cuaderno en octavo". Citado a su vez por J.L. Borges en "Libro de sueños".
38 DIÁLOGOS:
Sueño despertar.
Bufón, quiero que seas sincero conmigo y me digas quien ha publicado este texto ¿fue el Rey o vos?
¿O lo estoy soñando?
Dice el caption
lila magritte
Habeis sido vos
Señora Mía
Aunque no sé
si soy sincero
El Único Sabio
y Veraz por sí
a lo largo y ancho
de su Dilatado Reino
es Nuestro Sol
el Lear King
Perdón Querida Ama
no fui claro
Aclaro no fui yo
Ni en broma usurparía
la Real Función
Y ustedes ¿a qué están jugando?
No lo sabemos, estamos inventando el juego. Según lo que ocurriere y sus consecuencias, inventaremos las reglas, querida Therese.
En principio, quisiera solicitarle al Bufón del pueblo que arregle la hora en los comentarios para saber a qué atenerme, aunque como todos sabemos, el tiempo está siempre fuera de lugar, sobre todo en la virtualidad.
S.M. (s) Publicad en lugar visible de mi Reyno, por Decreto Regio.
Sacrísima Reyna (s): Os escribo feliz y un tanto acongojado a la vez.
Os cuento mi felicidad: vos como Reyna (s) y nuestro serenísimo Bufón, ahora bien llamado de la Corte y no del pueblo, por motivos de Posmodernidad y pertinencia epocal, habéis realizado un trabajo magistral con el ala subsumida de mi castillo, y, así, me gustaría que con paciencia y fervor, hicieráis algo igual con las correspondientes alas principales, para que mis salas color desierto, que por supuesto eran para evocar las Mil y una Noches, fuesen ornadas con abalorios y trofeos de montería, que por ahora podéis hallar en las cavas reales junto a los toneles de amontillado.
Regreso mañana y ambos, vos y el Bufón seréis recompensados. Por ahora debo advertiros que ha aparecido un "cazador de bufones" que quiere llevarse al Nuestro y sacarle la piel, y, por lo que colijo, también quiere vuestra piel de cebra.
En la Santa Bárbara de palacio hay suficientes arcabuces, pólvora, y fuegos artificiales que sirven para espantar cazabufones (me los regaló Gengis cuando anduve por sus Ciudades Invisibles) y además aceite humano de múltiples torturados que, hervido a 100 grados atormenta como las ánimas de los que fue extraído y mata sin piedad a los escudriñadores de bufones. Debéis cuidaros, mi Reyna (s) ya que sería atroz perder a tan altísimo y diligente bufón. De todas formas, creo que el cazador presunto es más bien un evidente impostor.
Ciudaos, Reyna (s) que ya nuestra Corte tendrá, por lo que he trabajado acá en el Sahara, una Reyna, mi Reyna Therese.
King Lear
Ingenioso Bufón de los mil ardides:
Os en verso escribo
ya que en verso vos os expresáis
y creo que si en verso sois de luenga retórica
en verso lo seráis también de entendimiento.
No os preocupéis, Bufón de ignorado,
pero presunto noble linaje,
por las habladurías del populacho,
que el populacho solo nos es útil
para afincar nuestras reales landas y beneficios,
de eolos solo esperamos la sangre absorber
y sus palabras, aire sobre aire, como el aire
que es, ignorar.
Si de aire se trata, solo escuchad a Eolo,
deidad magna, entre las almenas de nuestras
construcciones.
Y en cuestiones de arribas y de abajos,
no os perdáis en juegos de palabras
que la plebe pueda estar por ahí coreando
con malevas intenciones,
solo sabed que el rey siempre es arriba
por divinos y humanos mandatos irrefutables.
Ahora Bufón, de vuestro sexo o género
si decís que sois bufón
no he yo de tildarte de bufona,
ya que en cuestión de sexualidades
cada uno la suya sabe, mas no el otro
ya que con sorpresas podéis encontraros.
Mientras cumpláis bien como hasta agora
vuestras bufonescas funciones,
nada importa de si hembra que si macho,
que esos son solo avatares de Natura
que borrarán los siglos, el desdichado tiempo, los eones,
y solo de nuestros días y venturas, quedarán el soplo
de ese que hablan las religiones,
veras o paganas,
por lo tanto solo cumplid como hasta ahora
mis regias peticiones y gozad, cuando las recibáis
mis tambien veros y regios honores.
Sin más por ahora, y desde el árido desértico y contumaz Sahara, Lear, el Rey justo y versado en tropelias, guerras, gloria, mejestad y amores.
Se despide
Querido Bufón, como podeis leer más arriba, King Lear ha enviado mensaje.
Buenas noches a todos los habitantes del castillo, ya es hora de que despierten. Me ha llamado King Lear y está preocupado por la presencia de un cazabufones en nuestro Reyno.
Propongo hacer una fiesta para mantenernos en vigilia.
Despierten. Los estoy mirando, siempre.
Triministra He regresado a Palacio, es decir, más bien, al Castillo y Dios mi único Superior me pluga, como habeis trabajo vos y el Bufón! Mis halagos y parabienes reales para mis loables súbditos. Va en masculino ya que es el género que predomina en el plural, y vos sabéis la importancia de la Gramática en este castillo, y el Bufón no quiere confusiones genéricas. Aunque yo dudo de todo género en materias de entidades virtuales o clones del ciberespacio, pero no entraré en la metafísica de nuestra Naturaleza, eso nos llevaría a los terrenos de Blade Runner y la especulación filosófica. Para ello nombraré como filósofo a nuestro Historiador Real, que aún no conocéis, pero que llegó acá en espíritu pues fue asesinado con la Baronesa Sangrienta. Por ahora habeis recuperado vuestros fueros de Triministra y como tal debéis cuidar a nuestro diligentísimo Bufón, dado que creo es insustituible, aunque me han llegado a la Subsecretaría de Trabajo como veinte curriculums de bufones que quieren servir en esta corte, a los cuales se les ha denegado acceso y cargo. Creo que es uno de estos aspirantes el que se denomina a sí mismo el Caza Bufones, aunque he averiguado que existe una logia, derivada de los Templarios que lleva ese absurdo pero intimidante nombre La Logia Cazabufones. La clave esta en Hop Frog, y si nuestro bufón sigue ignorándolo corre riesgos más innombrables que los del populacho, sucio, ignorante, e ineficaz, como para temerle. En fin, debéis cuidar a nuestro leal vasallo. Ahora me debo retirar a mi balneario real, para darme un baño de aguas termales calentadas con fuego de dragón y aromatizadas con la piedra filosofal. Ah, antes de despedirme Triministra, permitidme un halago real: Qué ojos tenéis!: dos lagunas verdes, donde se puede ocultar, a la vez, el Paraíso o la Muerte. Pero basta, un Rey no puede permitirse tales licencias, así que adiós.
Y dadle mis parabienes y bendiciones con sello real inscrito al Bufón. Ya me comunicaré con él. El trabajo con Therese fue duro en el Sahara, vos sabéis imagino que los reyes en lides de Afrodita debemos ser insuperables y no descuidarnos por la guerra y la política real, sino ved el caso del desdicha Sir Arthur.
Me firmo como anónimo, por preocupaciones reales, pero voos, Triministra, que sabéis el códido abscóndito de nuestra comunicación, sabéis ya quién Soy.
Lear, por la Eternidad y Gloria de este Reyno.
He recibido vuestro mensaje, Majestad y lo divulgaré como es debido.
Interesante encontrar un castillo habitado en medio la Nada.
Buenas noches, ¿qué se teje en el castillo?
¿Sueñan? ¿Duermen?
La música es hermosa.
King Lear, ¿puede ver mi nuevo perfil?
¡¡¡¡¡Relámpagos, truenos y centellas!!!! un ratón se ha comido mi capatilla de levantar...
¡¡¡¡Dónde está el Bufón!!!
Aquí Mi Ama
Socorro! Socorro! Mi Señor...
Nos atacó un ratón!
Socorro, socorro!
Se comió el jubón
jajajajaja
Creo que Su Majestad no oye nada.
¿Estará con vida?
Hay que llamar a un tramposo, trampero, trampador trampolín de ratones, o mejor, a un vulgar desratizador. Debiera ser el que conoció Joaquín Edwards Bello, lo buscaré para mañana.
Un flautista serviría Ama?
Triministra, os agradezco vuestra dedicación en los asuntos de protección del Reyno.
Creo que vos y el adorable bufón de la corte se estáis desempeñando como corresponde a vuestros dgnísimos cargos encomendados por neustro tan amado, respetado y venerado Rey.
Sin embargo debo deciros que ratoncitos a mí y a tales horas me parece que es grave y delicado problema que deberéis resolver a la brevedad. De lo contrario, aquí volarán varias cabezas, empezando por la vuestra, Triministra.
Por ahora mi Rey duerme y cuando despierte habrá de enterarse por mi relato, antes que el vuestro, de la presencia de asquerosas ratas de Manhattan sur en palacio.
Y no olvidéis que yo soy la Reyna de este cuento.
Aún no, Madam.
He hablado con Su Majestad y el me ha dicho que busquen en su agenda el teléfono del Flautista y lo llamen de parte de él. Dice que son amigos así que le pidan conservar el precio del último trabajo y ser breve en la acción.
También ha pedido le informen el tamaño del ratón porque de eso depende si sería efectivo y seguro para el flautista.
Comuníquese, publíquese y archívese
Notable, no hay más palabras ante tan magno oficio.
Triministra, no soy la Reyna aún, pero ya lo seré y dominaré con mano férrea.
HE DICHO
YO
a quien le falta poco para ser la Reyna
Para llegar a La Reina hay que tomar la micro de Polhammer.
Súbditos míos, Triministra, Bufón. En momentos de emergencia Real como este, debo dirigiros mi Magna palabra, que una vez proferida es ya Sentencia. Primero, os alabo vuestra diligencia, que en tanto esto escribo, ya habeis, por lo que veo, dado cuenta del ratón. Fue el Verdugo Real, quizá quien de él dio cuenta, pues recozco su hacha en pleno cráneo del malhadado bicho. Afortunadamente, no ha sido necesario el Flautista de Hamelin, ya que dicho condado tiene las arcas por las nubes desde que entró a ser socio de la Unión Europea y cobran ya no en doblones de oro sino en Euros.
Debo declarar: acá impera la Vera Tradición,la de los presentes isabelinos tiempos, y la férrea espada recia del rey anglosajón, o sea YO.
Triministra, dejad que la futura Reina siente sus fueros, pero acá siempre el sello real de los decretos y la última palabra será de Lear. Vos sabéis que hay asuntos en la corte que en alcoba se tratan mejor, pero eso, vos Triministra, callad, será un secreto real entre ambos.
No se vaya a andar diciendo por ahi que el Rey es un Macabeo. Vos sabéis que la futura Reina es de temer cuando se le desboca la cabalgadura y frente a un teclado con acceso a la blogósfera muta en mono con navaja.
Decidle al bufón que ya encargué una partida de diez mil jubones de Pierre Armani para que reemplace el por el ratón devorado. Aunque con tamaño ejemplo de caza, haya sido el bufón o el verdugo, no creo que otro "roedó" se atreva a venir a importunarnos. Y vuestra capatilla también será reemplazada por una Calpany.
Mañana sabréis más noticias del Reyno, pues el Historiador de la Corte sólo trabaja en días hábiles, dado que le he concedido esa franquicia por su luenga edad que sobrepasa con creces los 100 años.
Lo último, otra vez, el bufón está arriba y el Rey abajo... imaginaos lo que puede decir la Plebe.
Vuestro,
King Lear el Magno
{Histérico, en lo alto, desde una araña de Murano }
-Guardias!
-Ay! !Ahí Hay Otro!!
-Ay! ¡¡Horror!!
-¡Dónde os escondéis Mi Lord?
No sé cómo he de calmar mis nervios ahora que las sospechas en cuanto a la identidad de los ratones sueltos en los salones del castillo, me atormenta. Es posible que estemos matando a Reyes encantados...
No sé cómo he de calmar mis nervios ahora que las sospechas en cuanto a la identidad de los ratones sueltos en los salones del castillo, me atormenta. Es posible que estemos matando a Reyes encantados...
Y mis mensajes se desdoblan...reina la confusión ante el llamado al orden de Su Majestad.
Trimisntra, calma y tranquilidad. Recuerde que los príncipes no han sido jamás convertidos en ratas ni rataones, sino en sapos. Recuérdelo. De manera que lo que aquí se ha extreminado son ratas, solo ratas.
Se lo dice
Su Reyna